NÍGER: EL HAMBRE GOLPEA A MÁS DE 7 MILLONES Y MEDIO DE PERSONAS
08/03/2010
La tasa de inseguridad alimentaria severa se ha triplicado en un año: el 20% de la población se encuentra en una situación de inseguridad alimentaria severa y el 38,2% de inseguridad alimentaria moderada, con el riesgo de ser gravemente vulnerables dado su bajo nivel de existencia.
Ya en diciembre se detectó que 6 de cada 10 familias tenían existencias de alimentos entre 10 días y 2,8 meses para sobrevivir, hasta la próxima cosecha en octubre del presente año. Esto significa que las reservas de alimentos de los más vulnerables se acabaron en enero.
Malas cosechas por circunstancias climáticas, el incremento del precio de los alimentos, la trashumancia por la escasez de pastos ha aumentado la vulnerabilidad de los hogares y llevado a Acción contra el Hambre a comenzar una intervención de emergencia que se prolongará durante todo el año 2010.
Tras detectar una tasa de inseguridad alimentaria del 58,2% del total de la población, lo que equivale a 7,8 millones de personas, y para anticiparse al “periodo de escasez alimentaria”, Acción contra el Hambre se propone intervenir en el refuerzo del sistema sanitario y la mejora de la seguridad alimentaria, con el objetivo de reducir el impacto de la crisis en la vulnerabilidad de los hogares nigerinos desde el mes de marzo hasta el final del año.
Inseguridad Alimentaria
“La tasa de inseguridad alimentaria severa se triplicó entre 2008 y 2009, lo que se traduce en que casi el 60% de las comunidades no podrá cubrir sus necesidades alimentarias hasta la próxima cosecha en octubre. Una situación que podría agravarse ya que se ha incrementado el índice de estrategias de supervivencia, reveladas por una encuesta de vulnerabilidad realizada por el gobierno nigerino en diciembre (disminución del número de comidas diarias, días enteros sin comer, mendicidad, endeudamiento…) que ofrecen testimonio de un contexto critico”, señala Noemí Muñoz, responsable geográfico de Acción contra el Hambre.
Durante 2009 se produjeron precipitaciones irregulares, mal repartidas y que se interrumpieron anticipadamente, que han llevado a una insuficiencia de la producción cerealista y forrajera. El déficit supera las 400.000 toneladas para la campaña agrícola y los 16 millones de toneladas para la campaña pastoral, lo que representa el 67% de las necesidades del ganado nacional. Asimismo, se ha detectado un aumento significativo del precio de los cereales entre diciembre del pasado año y enero de 2010, y tempranos movimientos pastorales y nómadas, indicio de la escasez de pastos, que conllevan una fuerte disminución del precio del ganado, factores todos estos que aumentan la tasa de población en situación de inseguridad alimentaria con consecuencias para su estado nutricional.
En respuesta a estas condiciones de la situación alimentaria y humanitaria, el gobierno nigerino ha identificado tres prioridades para intervenir, materializadas en actuaciones concretas sobre el terreno a través de un plan de apoyo. Este plan cubre sólo el 30% de la población con inseguridad alimentaria para un periodo de 3 meses. Las dos primeras prioridades se enfocan hacia la seguridad alimentaria y la tercera a la prevención de la desnutrición y la atención nutricional de los niños y niñas menores de 5 años. A partir del mes de marzo comenzarán actividades de dinero por trabajo, se crearán más de 800 bancos de cereales y se reforzará los más de 1.000 ya existentes, y se abastecerán las reservas de cereales (mijo, sorgo, maíz, arroz, trigo…). Por otra parte, se llevará a cabo la venta de cereales a precio moderado, se brindará apoyo a la producción, distribuyendo raciones de cobertura en apoyo a los hogares durante la temporada agrícola, se suministrarán semillas en los pueblos deficitarios y se iniciará la reconstrucción de la reserva nacional cerealista de seguridad.
En este escenario, Acción contra el Hambre inicia su intervención de emergencia en apoyo al plan del gobierno y continúa con sus proyectos de desarrollo y reducción del riesgo de catástrofes en dos departamentos entre los más afectados por la inseguridad alimentaria. También se abre un nuevo programa de emergencia financiado por la cooperación británica, (DFID, por sus siglas en inglés), en apoyo a las poblaciones vulnerables del departamento de Mayahi.
Crisis nutricional
En el plano nutricional, la consecuencia directa de esta situación se traduce en un aumento en el número de casos de niños menores de 5 años que sufren desnutrición aguda y que deberán ser puestos a cargo de los servicios de salud durante los próximos meses. Según el Boletín del Centro de Información y Comunicación del Gobierno publicado en febrero de 2010, se teme que la cantidad ascienda a por lo menos 200.000 niños y niñas severamente desnutridos y casi 1 millón de niños con desnutrición moderada.
En Mayahi, Acción contra el Hambre está desarrollando un proyecto de apoyo al sistema de suministro nacional de medicamentos para que los tratamientos de la desnutrición lleguen correctamente al departamento como parte de los medicamentos genéricos esenciales.
El Departamento de Ayuda Humanitaria de la Comisión Europea (ECHO, por sus siglas en inglés) ha señalado que para evitar esta crisis las necesidades financieras ascienden a 200 millones de dólares. En las circunstancias actuales, es esencial la rápida movilización de fondos de emergencia para Níger.
“Desde Acción contra el Hambre hacemos un llamamiento a las autoridades y a los donantes internacionales. Todavía hay tiempo de actuar para frenar el impacto de la crisis que padecen casi 8 millones de personas, entre las que se cuentan casi 1 millón de niños y niñas con desnutrición moderada y 200.000 severamente desnutridos. Nuestros equipos en terreno priorizarán su trabajo en la asistencia a los hogares más vulnerables y a los niños y niñas entre 6 y 59 meses”, añade Noemí Muñoz.
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